Propósito, acción y estrategia política en el 2018
Despido el 2017 con dulzura y mucho agradecimiento.
Este año ha sido muy importante para mí, he hecho algunos cambios que han significado una ruptura con mi etapa de política activa durante 18 años. Sin embargo, tras mucho tiempo de cavilaciones y de tener a mi mente dando tumbos intentando razonar cuál era la mejor decisión, llegué a mi destino.
Sentí que había llegado el momento de cerrar esa puerta para que otras pudieran abrirse. A veces la vida requiere contundencia y no permite medias tintas.
Ahora entiendo que necesitaba todo ese tiempo para aprender lo imprescindible para llegar hasta aquí.
Así miro con ilusión el 2018, planificando con mimo lo que me gustaría que ocurriera por un lado, y dejando un amplio margen a la incertidumbre para que la vida me sorprenda.
En enero comienzo nuevos programas de coaching y mentoring político. Emocionada de poder seguir la política como generadora de cambios, aunque ahora sea «desde el otro lado».
Eso es para mí la política, un instrumento para generar cambios
Sigo confiando en la política porque sigo confiando en las personas.
Ahora toda mi energía la dirijo a trabajar con políticos en activo que tienen ganas de transformar la sociedad, que creen que el cambio de la política comienza en el interior de la persona y que saben que su crecimiento político depende de su crecimiento personal.
Crecimiento político de la mano del crecimiento personal.
Cada mes de diciembre, realizo lo que aprendí con 14 años en los boy scouts «Mi carta pionera».
Se trata de hacer balance e introspección sobre cómo han sido estos meses y cuáles son mis propósitos para lo siguientes.
Digamos que pongo por escrito cuáles son mis intenciones. y a partir de ahí pongo mi energía y atención a trabajar sobre ello. Así es como consigo seguir los pasos que me marco y no perderme en la vorágine del día a día.